Pues si, nos fuimos para Argentina. Jugamos en la bonita ciudad de San Carlos de Bariloche. Nuestro anfitrión nos hospedó en El Casco Art Hotel, con unas maravillosas vistas al lago Nahuel Haupi. Sufrimos poco el jet lag, en parte por el cansancio acumulado que nos hizo dormir durante el vuelo, y por el suculento almuerzo con el que nos recibió TiinALVZ, curanto, cordero patagonico asado y unos doces de rosa de Mosquera y chocolate, que hicieron de nuestros chavales unos auténticos devora platos. Tras la comida, una siesta para mejorar la digestión y a jugar. Primera sorpresa, el campo estaba nevado. Decidimos jugar, que a eso habíamos ido, con cuidado de no forzar demasiado las piernas. Segunda sorpresa, el agua congelada, estábamos a -3º. Unas cervezas para beber y a jugar se dijo.
El partido estuvo dominado claramente por los locales. Llevaron el mando del partido, crearon más peligro y estuvieron más a gusto sobre el campo. Sólo un gol de Akimov de falta, donde demostró ser un artista, marco nuestra participación. Apenas creamos ocasiones, estando todo el partido algo distraídos. Pero merecía la pena, no siempre disfrutaremos de jugar en la cordillera de los Andes.
Intentaremos que nos visiten próximamente nuestros amigos barilochenses, así podremos mostrarles las maravillas de Santander y alrededores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario